Este episodio es memorable en un sentido de complejidad moral y reflexiva aunque también hay un egoísmo consiente.
Kino llega a un país que tiene la reputación de ser horrible para los viajeros. Cuando llegan allí, sin embargo, les parece que está lleno de personas muy amables, generosas y acogedoras. Una joven llamada Sakura toma el puesto de guía de Kino durante su estadía, y juntos ven todos los lugares que este país tiene para ofrecer. Los padres de Sakura incluso consideran pedirle a Kino que tome a su hija como compañera de viaje.
Lo que me hizo sospechar es que algo se estaba ocultando de tanta generosidad, los guardias parecen muy aliviados cuando Kino declara que tienen la intención de irse después de tres noches.
Spoiler: No leer a menos que hayas visto el episodio
Básicamente, estas personas actúan como si estuvieran a punto de morir, el país está a punto de ser consumido por una explosión volcánica, y sus ciudadanos han decidido morir en su tierra natal en lugar de evacuar para intentar reconstruir desde cero. Quizás suene ilógico, pero esta es una decisión que las personas han tomado en circunstancias similares, y no una de la que pueda estar enfadado, siempre que sean plenamente conscientes de lo que realmente están abandonando. Desafortunadamente, estas personas también decidieron llevar a sus hijos inocentes junto con ellos. La ironía oculta en todo esto es que Kino finalmente había encontrado un país en el que quería establecerse.
Así que estas personas desperdician sus vidas sin embargo resulta en la muerte de innumerables inocentes especialmente los más pequeños. Renunciaron a sus vidas en lugar de tratar de cambiar. Al final, se revela que Sakura sabe sobre el volcán y tomó la decisión consciente para morir junto a su familia. La escena culminante del episodio es un gran compendio de la complejidad temática y emocional una de las características principales de la serie.
Mientras Kino observa la erupción y lee la carta de la madre de Sakura, emerge una compleja reevaluación de la situación inmediatamente. La satisfacción de Kino se convierte en dolor (que en realidad es visible a partir de sus expresiones faciales) y cuando Kino lee la carta de Sakura y experimenta la segunda reversión del episodio, se abre un significado completamente nuevo que es más personal para Kino y la ética cuestionable de su propia forma de vida se hace más compleja.
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