Director: James Marsh
Este documental yo lo vi en Discovery, sino mal recuerdo en el año 2010, y ahora que lo he vuelto a ver realmente me ha sorprendido. Yo nunca había escuchado de Philippe Petit, hasta que vi este documental.
Un documental que retrata las hazañas de Philippe Petit, un francés acróbata, malabarista o como el mismo se autodenomina, un funámbulo (una palabra que nunca había escuchado, siempre es bueno aprender algo nuevo) retratando una de sus acrobacias más recordadas. El 9 de agosto de 1974, realizó un acto increíble y muy ilegal: caminó a través de las torres del ‘World Trade Center’ sostenido por un cable en la cima entre los dos edificios.
Desde el momento en que se enteró de la construcción del World Trade Center, Petit, que había realizado acrobacias similares a través de la Catedral de Notre Dame en París o en el Puente de la bahía de Sídney; él estaba obsesionado con encontrar una manera de cumplir su sueño de escalar las Torres Gemelas. Este documental detalla la planificación cuidadosa, la práctica intensa, el trabajo en equipo, la habilidad para solucionar una situación difícil y la complicidad para hacer realidad la atrevida ambición de Petit. El documental combina imágenes de archivo, entrevistas actuales (el año en que se produjo el documental) con aquellos que participaron y recrearon para mostrar los años de preparación, el acto en sí y las consecuencias inmediatas de los logros de Petit.
Este es un documental inolvidable sobre no solo un truco atrevido sino también sobre la necesidad de seguir nuestra propia voz interior que nos impulsa a intentar y seguir nuestros propios sueños de grandeza. Uno solo puede esperar que las generaciones futuras, al imaginar el World Trade Center, no tengan inmediatamente las terribles imágenes del 11 de septiembre de 2001, y sus secuelas, sino que tendrán la imagen de un hombre caminando sobre un cable en lo alto entre las dos torres, en total y completa concentración, manteniendo el equilibrio. Aunque Petit suena romántico cuando habla de que no habría mejor manera de morir que "en el ejercicio de tu pasión", esta "actuación" legendaria requirió mucho tiempo y esfuerzo, práctica y preparación, por no hablar de la complicidad de algunos que trabajaban en el WTC y de hombres y mujeres que potencialmente arriesgaban su propia libertad (si Petit hubiera muerto, muchos habrían sido acusados de complicidad en su asesinato) y ‘Man on a Wire’ llega lejos al mostrar todo lo necesario para lograr esto.
Man on Wire es de 80 minutos seguidos de un clímax sorprendente y muy emocional.
Una hazaña magnífica contada por sus propios participantes. Emocionalmente atractivo y estimulante.
Lo curioso es que en el documental nunca menciona sobre los acontecimientos del 11 de septiembre.
Sinceramente yo lo considero uno de los documentales más inspiradores que vi.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario