Batman y el Pingüino se enfrentan a causa de un objeto valioso robado; el pingüino incapacita a Batman con gas venenoso. Batman es rescatado por un niño llamado Sherman y su amiga Roberta, quienes lo esconden en el sótano de la casa del niño, el tiempo suficiente para que se recupere antes de que el pingüino los encuentre.
El comienzo fue entretenido, con Batman atrapando a un par de ladrones donde parecía ser un episodio clásico. Pero el resto la historia con los niños, el episodio se tornó muy inocente y simple, ignorando algunos de los principios esenciales de la serie; evitar las situaciones muy infantiles y las interpretaciones de los villanos tienen que ser más oscuras que sus predecesoras. La trama se convierte en algo inverosímil. La actitud del pingüino fue lo que menos me gusto, no estuvo a la altura de los grandes villanos de la serie además su interpretación resulto demasiado infantil. Pero no todo fue cuesta abajo, si es que vi de niño este episodio aunque no recuerdo muy bien, estoy seguro que hubiese estado todo el rato entretenido.
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