Este es el episodio que necesitaba ver de la serie, relucir todo su potencial en cuanto al atletismo fue sinceramente impresionante.
Casi me olvido de lo poco convencional que puede ser este encantador club de carreras, pero trajo esas diferencias en marcado contraste en la primera reunión del club. El grupo heterogéneo de la Universidad de Kansai se enfrentó a los corredores universitarios más rápidos de la región. La animación fluida y los diseños de personajes limpios en movimiento hicieron que este episodio fuera particularmente dinámico. Más que nuestros diez corredores, sin embargo, fue la cámara la que más atención recibió en el episodio 7, marcando el ritmo de su movimiento cinético.
El club de la Universidad de Kansai sobresale, incluso con sus elegantes uniformes nuevos. Pero cuando resulta que Haiji es amigo del atleta más formidable en el encuentro, incluso Kakeru se ve obligado a retroceder. Esta escena está diseñada para presentarnos a un nuevo y formidable oponente, pero lo que encuentro más efectivo es la forma en que se refleja en tanto carácter a través de las reacciones de todos ante el conflicto, desde la mirada deslumbrante de King hasta las caras graciosas de los gemelos. Desde las habilidades de conducción de la pesadilla de Haiji hasta la preparación de todos para la carrera, por lo que este anime siempre es rico en caracterización. Más de la mitad de la temporada, sigo manteniendo que esta es una de las representaciones más efectivas de un elenco de ensamble grande que he visto en el anime porque muestra mucho de todo el mundo en tan pequeñas porciones.
Sin embargo, la mayor parte del episodio está dedicado a la carrera de 5k. ¡Felicitaciones al show por hacer 12.5 vueltas repetitivas alrededor de una pista que parecen interesantes! Aquí es donde la cámara funcionó mejor. Cuando Kakeru aceleró el paso, la cámara rebotó junto con su trote, enfocándose cada vez más en los acercamientos de la parte posterior de la cabeza del corredor delante de él. Las constantes revoluciones de la cámara nos ayudan a experimentar el movimiento que se produce alrededor de la pista, mostrando el aplastamiento del paquete inicial (mientras Haiji se sobresalta de una lesión en la rodilla) y el largo camino hacia el final. Como siempre, Prince es el favorito de los fanáticos, ya que se acerca a la retaguardia con un rastreo similar a un zombie y una mirada de agonía que cualquier corredor de distancia reconocerá. Combinada con el ritmo de la banda sonora y la respiración trabajosa de los corredores, la tensión de la carrera es palpable.
Sabíamos que la mayor parte del equipo no iba a romper ningún récord de velocidad en tierra, pero tenía grandes esperanzas para Kakeru. Sin embargo, cuando Manas corrió hacia el frente y Kakeru lo siguió rápidamente, resultó que la advertencia de los espectadores de que "los chicos son atraídos por su velocidad y aceleran su ritmo" resultó ser cierta. Todo este tiempo, Kakeru había estado advirtiendo a Haiji que la reunión de pista sería una verificación de la realidad que el equipo no podría manejar. Ese no fue el caso, el equipo tiene bastante confianza en su progreso mínimo. En cambio, resultó ser una llamada de atención para el propio Kakeru. Al final del episodio, está temblando de tanta rabia que la cámara finalmente se queda inmóvil en otro uso hábil del movimiento, o esta vez, una falta de él. Es el episodio 7, pero nunca nos hemos sentido más lejos de las montañas Hakone. Kakeru necesita enfrentarse a sus propios demonios antes de que finalmente pueda trabajar con el equipo, y tengo fe en que este programa representará su desarrollo de manera magistral.
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