Aparte de que Usaida estuvo enfermo y no pudo asistir a la guardería, aunque por una divertida confusión tuvo que ir; lo más revolante fue observar a Inomata y Yuki, aprendiendo y compartiendo un cálido momento con los pequeñines en la guardería, y por supuesto disfrutar de la compañía de Ryuichi.
El encargado de reemplazar por un día a Usaida fue Keigo Saikawa (el mayordomo) quien tendrá algunas dificultades pero al final intentara sobrellevarlo a su manera, improvisando y resolviendo los dilemas como manda su personalidad típica de un mayordomo, indescriptible y conciso.
Mientras que en la segunda historia, Yuki e Inomata quieren acostumbrarse a estar rodeado de niños, donde las dos se animan a visitar la guardería de Ryuichi.
Veremos muchas travesuras de los pequeñines y momentos especiales, como la primera palabra de Midori y la ya consolidada amista de Inomata y Yuki.
El próximo episodio va ser el último y ojala que nos brinden una despedida con muchas emociones reconfortantes.
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