Me he quedado sumamente sorprendido. Es cierto que este corto tiene una historia simple, pero la animación minimalista fue de los más hermosos que he visto en años. No necesariamente un arte tiene que ser complejo para destacar; con simplemente buscar la simpleza del arte, puede entrar muy hondo en tu alma. Un corto simple y de animación 'simple' puede convertirse en una obra maestra.
Dos hombres tienen una avería en el coche mientras conducen por el desierto. Discuten de quién es la culpa de su problema y deciden esperar a que se ponga el sol antes de volver a la parada de descanso más cercana.
La escala les da tiempo para reflexionar y especular. El desierto en el que están atrapados fue una vez un lecho marino. El hombre mayor se pregunta en voz alta si los fantasmas de los peces persiguen el desierto de la misma manera que los fantasmas humanos acosan a las casas. Como por arte de magia, todo tipo de criaturas marinas prehistóricas giran alrededor e incluso a través de ellas. Lleno de emoción por lo que están viendo, el hombre más joven despega y se deja arrastrar por la corriente; mientras nada y se eleva, no logra ver al tiburón gigante dirigiéndose hacia él...
Esto se ve fantástico. Haciendo un gran uso de la animación de celdas sombreadas, los colores saltan fuera de la pantalla y envuelven completamente al espectador. La configuración diurna del desierto se ve estéril y presagia, pero es en la noche cuando los peces cobran vida que "Fish Night" realmente se destaca; con una gama de verdes y naranjas en contraste con el fondo marino del cielo nocturno.
Los animadores también hacen un gran trabajo para dar vida a los dos hombres que aparecen. Están completamente realizados, y el trabajo de voz es de primera clase. Sume todo esto junto con una puntuación de barrido y movimiento, y tendrá un trabajo realmente emocionante.
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